Lamento: Cómo podemos procesar la guerra
“Las lágrimas inundan mis ojos;
siento una profunda agonía.
Estoy con el ánimo por los suelos
porque mi pueblo ha sido destruido.
Niños e infantes desfallecen
por las calles de la ciudad.”
Lamentations 2:11
"Recuerdo a todas las partes que en esta guerra, como en todas las guerras, son los niños los que sufren primero y los que más sufren." (UNICEF Executive Director)
Resulta desalentador intentar escribir algo público sobre la guerra en el Medio Oriente. Aunque la historia y las complejidades son más de lo que la mayoría de nosotros entendemos, todos tenemos una respuesta de algún tipo (ignorar, enfurecerse, buscar ayuda, orar) cuando oímos más noticias.
Sepa que esto no es una “opinión candente” sobre política exterior ni un comentario sobre cómo, qué o si usted mismo debe publicar algo públicamente.
Aunque Dios nos llama a trabajar, a dar y a luchar por lo que es justo, en este momento estoy aquí para ofrecer una oportunidad para lamentarnos.
Y me apoyo en otros creyentes para que nos muestren el camino:
"El lamento es una forma de oración. Es algo más que la expresión de una pena o el desahogo de una emoción. El lamento habla a Dios sobre el dolor. Y tiene una finalidad única: la confianza. Es una invitación divina a derramar nuestros miedos, frustraciones y penas para ayudarnos a renovar nuestra confianza en Dios. . .
Llorar es humano, pero lamentarse es cristiano. . .
Los cristianos no sólo lloramos el quebrantamiento del mundo, sino que también anhelamos el día en que cese todo llanto. Nos preguntamos: ‘¿Hasta cuándo, Señor?’(Salmo 13:1). Cualquiera puede llorar. Pero sólo los cristianos pueden lamentarse fielmente.” - Mark Vroegop
Esta es una oración de lamento de Kate C Bowler que podamos orar por el pueblo de Israel, Gaza y Cisjordania hoy, mañana y siempre.
El mundo no está perdido,
pero a veces lo parece.
Con árboles y hogares desarraigados...
y las vidas de las personas junto a ellos.
Con guerras encarnizadas y una violencia incesante.
Con la total aleatoriedad de los desastres
y tragedias que no parecen discriminar.
Con el hambre, los sin techo y las pandemias.
Bienaventurados los que clamamos-
¿Hasta cuándo, Señor?
El sufrimiento que presenciamos es insoportable.
Ven pronto.
Trae alivio rápido y dulce consuelo a los necesitados.
Y bendice a los que nos sentimos impotentes ante tanto mal.
Danos ojos claros y mentes agudas y corazones valientes
para saber qué poco podemos ofrecer
para aliviar el dolor cuando podamos,
para dar testimonio de lo que exige ser visto.
“Y les aseguro que estaré con ustedes siempre, hasta el fin del mundo.”
—Mateo 28:20, NVI
Dios, tú conoces la necesidad.
Tú eres el principio y el fin.
No nos has dejado solos.
Dios, ten misericordia. Cristo, ten misericordia. Espíritu, ten misericordia. Amén.
ACERCA DE NUESTRA BLOGUERA
Originaria de Georgia, Mary Beth Gombita es una amante del té dulce, una orgullosa Bulldog de Georgia y una ávida fanática de la música.
Trabaja en el sector de las relaciones públicas y dirige su propio negocio de consultoría de comunicación desde casa.
Mary Beth y su marido, Stephen, tienen dos hijos pequeños.
Actualmente es la editora de nuestro blog Willowdale Women.
ACERCA DE NUESTRA TRADUCTORA
Maritza Zavala Smith nació en Guanajuato, México, y se trasladó a los Estados Unidos cuando tenía siete años. Estudió Salud Pública en Penn State, donde conoció a su esposo. Llevan 8 años casados y tienen dos niños gemelos y una bebe. A Maritza le encanta viajar y bailar salsa. Cuando no está deleitándose con el té verde matcha con leche y estando al aire libre con sus seres queridos, puedes encontrarla aventurándose con su tribu a través de los libros.