¿Conoces Tu Propia Cosmovisión?

¿Conoces Tu Propia Cosmovisión?

Hace poco me crucé con la investigación del Dr. George Barna de El Grupo Barna que muestra que “solo el 6% de todos los adultos estadounidenses tienen una cosmovisión bíblica. Apenas es mejor entre la población auto-identificada cristiana (9%)”.

¿Impactante? Bueno, considera las conversaciones que tienes con las personas en tu vida diaria.

El impacto de las palabras: Segunda parte

Una vez oí a alguien describir su soltería de esta manera: "Golpea, pero no atormenta". Estas seis palabras resumen perfectamente mi propia experiencia como soltera. La mayoría de los días, me siento realmente satisfecha con mi situación sentimental.

Provengo de una familia biológica muy unida (inmediata y extensa) a la que visito con bastante frecuencia.

Estoy rodeada de amigos increíbles y de una maravillosa familia eclesiástica.

Voy a trabajos que disfruto durante el día y duermo en un hogar donde me siento segura por la noche.

Me despierto emocionada por poner el lápiz sobre el papel y perseguir los sueños que he tenido desde que era niña.

Sé que estoy salvada, restaurada y profundamente adorada por el Dios que dio nombre a las estrellas y creó mi corazón. Él me ha dado tantas bendiciones que están mucho más allá de lo que merezco, y necesito recordármelas todos los días.

Porque los días en que mi soltería golpea, golpea fuerte.

Puede que sea una invitación de boda, fotos de compromiso con luz dorada colgadas en Facebook o el final injustamente feliz de una comedia romántica. Puede que sea un martes por la noche, cuando estoy sola en casa y deseo tener a alguien con quien comer y ver películas de Pixar. Puede que no esté provocada por nada en particular.

Pero en esos momentos, las mentiras del enemigo comienzan a colarse, el tipo de palabras que se clavan en mi corazón y lo hacen tan pesado que apenas puedo mantenerme en pie.

Eres demasiado.

No eres suficiente.

Nadie te quiere.

Todo el mundo siente lástima por ti.

Tus amigos se han olvidado de ti.

Estarás solo el resto de tu vida.

Esto, amigas, es por lo que necesitamos que nos cuentes la verdad. Para recordarnos quiénes somos y de quién somos. Para contemplarnos como un precioso portador de la imagen de Dios, uno cuyo camino puede ser un poco diferente al de la mayoría de las personas que nos rodean, especialmente si estamos en la iglesia. (y especialmente si tenemos más de veinticuatro años).

Podría hablar durante días de todas las cosas inútiles que he oído como persona soltera (y ya lo he hecho en la Primera Parte de esta serie), pero creo que es igualmente importante dedicar tiempo a hablar de las palabras útiles que se pueden decir a una persona soltera.

Estas palabras pueden consolar a un alma herida de la misma manera que los besos en las rodillas raspadas pueden calmar a un niño que llora. No arreglarán el dolor de tu amiga soltera ni borrarán nuestra soledad.

Lo que sí harán es hacernos saber que no estamos solas.

Puede que no tengamos un anillo de boda en el dedo, pero tenemos un grupo de hermanos y hermanas que pueden ayudarnos a desenredar las mentiras en las que hemos estado creyendo. Tenemos madres y padres espirituales que pueden mirarnos a los ojos, tomar nuestras manos izquierdas desnudas entre las suyas y llorar con nosotros el dolor que se agudiza con cada cumpleaños. Tenemos la familia de Cristo a nuestro lado, una familia que durará mucho más allá de esta vida terrenal y hasta la eternidad.

En el fondo, muchos solteras sabemos estas cosas. Sin embargo, significa mucho para nosotros que nuestras amigas no solteras nos recuerden que somos importantes para ellas. Que somos seres humanos completos que merecemos el tiempo, el cuidado y la atención de otra persona.

He aquí algunas palabras que harán precisamente eso:

Nunca te había visto por aquí. ¿Cuál es tu historia?

¿Quisieras tomar un café o comer juntas algún día? Me encantaría conocerte mejor.

¿Cómo has experimentado la bondad de Dios recientemente?

¿Qué sueños o metas tienes para tu vida?

¿Esperas casarte algún día?

¿Te sentirías cómoda compartiendo cómo te sientes acerca de tu soltería hoy?

¿Te interesa que te organicen una cita? ¿Qué rasgos buscas en una pareja?

¿Te gustaría cenar conmigo y mi familia?

¿Te gusta pasar tiempo con niños? ¿Te interesaría cuidar a los míos?

¿Cuáles son tus dones? ¿Cómo te ves utilizándolos para servir a la familia de tu iglesia?

¿Cómo puede tu familia de la iglesia servirte mejor como persona soltera?

¿Cuáles son las cosas buenas de ser soltera?

¿Cuáles son las cosas difíciles de ser soltera?

¿Se siente sola alguna vez una persona soltera? ¿Hay algo que pueda hacer para ayudar?

¿Vas a hacer algo especial por tu cumpleaños?

¿Tienes planes para las fiestas? ¿Te gustaría pasarlas con mi familia?

¿Te gustaría sentarte hoy con nosotros?

¿Puedo darte un abrazo?

¿Puedo orar por ti?

Sé que esto es difícil para ti y lo siento.

Sé que esto no es lo que pensabas que sería tu vida. Está bien que te aflijas por eso si lo necesitas.

Aquí tienes unas flores que me regalaron/una tarjeta que hice/unos caramelos que compré porque estaba pensando en ti.

Creo que es hermoso cómo vives tu soltería tan fielmente.

Estoy tan feliz de que estés aquí.

Perteneces a nosotros.

Tú eres vista.

Tú importas.

Te quiero.

¿Te gustaría pedir comida para llevar y ver una película de Pixar conmigo alguna vez?


ACERCA DE NUESTRA BLOGUERA

Kati Lynn Davis creció en el condado de Chester. Tras una breve estancia al otro lado de Pensilvania para obtener un título de escritora en la Universidad de Pittsburgh, regresó al área y consiguió un trabajo en una biblioteca local. Cuando no está escribiendo, a Kati le gusta leer, dibujar, ver películas (¡especialmente de animación!), beber té de burbujas, pasear con sus gatos y salir a correr muy despacio. Kati está bastante segura de que es un Eneagrama 4, pero constantemente tiene una crisis de identidad al respecto, así que afortunadamente está aprendiendo a arraigar su sentido del ser en Jesús.

ACERCA DE NUESTRA TRADUCTORA

Liliana Daza es la hermana mayor de 4 hijas de una familia colombiana muy conservadora. Oriundos de un pequeño pueblo ubicado en el Oriente de Colombia en frontera con Venezuela donde creció y pasó su niñez. Luego se mudó a la capital para terminar sus estudios superiores en el área de tecnología. En el año 2011 se trasladó a los Estados Unidos junto con su familia debido a una oportunidad laboral. Desde temprano, Liliana ha sentido un llamado para servir y apoyar a la comunidad, por lo que aprovecha cada oportunidad que Dios pone en su camino para este propósito. Liliana disfruta de un buen café negro, viajar, comer buena comida, especialmente cuando viaja. Liliana hace parte de la Iglesia Willowdale en español casi desde sus inicios.


Alcanzando La Mano de mi Padre

Nací en el cumpleaños de mi padre. Esto creó un vínculo especial entre nosotros. A menudo decía que yo era su mejor regalo de cumpleaños. Su amor por mí siempre fue evidente y ese amor me dio mucha seguridad y confianza. 

Contrasta mi historia con la de mi abuela. Ella nació después de que su padre abandonó a la familia, para nunca conocerlo. Creció en Suecia, luego vino sola a Estados Unidos cuando tenía unos veinticinco años. Crecí en la casa al lado de la de ella. Mi abuela era un alma tan silenciosa. Recuerdo verla casi todos los días y pasar mucho tiempo allí. Pero no la recuerdo compartiendo una sola historia, nunca. Sólo lo que conozco de los recuerdos de mi madre. Su vida parecía estar caracterizada por la inseguridad. Al final de su vida, en un asilo de ancianos, llegó a la fe en Jesús. Mi mamá no podría haber recibido un mejor regalo que saber que finalmente entendió el evangelio y su necesidad de un Salvador. Lo veo como una hermosa historia de redención de alguien que siempre se había creído huérfano, encontrando el amor de su Padre Celestial. 

Hay muchas historias de huérfanos en la literatura. Las que más me resuenan son las niñas que encuentran un hogar con una figura paterna. Heidi y su abuelo, Cosette y Jean Valjean de Los Miserables, Annie y Daddy Warbucks, y el pequeño Eppie de Silas Marner. Aunque una hermana y un hermano adoptan a Ana en Ana de las Tejas Verdes (Anne of Green Gables), es el hermano, Matthew, quien se convierte en el padre cariñoso. En parte, cada una de estas historias examina el sufrimiento de un huérfano y el papel sanador de un padre adoptivo. Estas historias hacen eco de la compasión que se encuentra en toda la Biblia por los huérfanos. 

Cuando pienso en mi papá, pienso en lo segura que me sentía con él. Era un buen proveedor. Siempre estuvo presente. Trató de corregir el mal comportamiento, no siempre a la perfección, pero por lo general con un esfuerzo por enseñar en lugar de simplemente castigar. Él era callado. Sirvió cuando se le pidió. A menudo lo he descrito como alguien que deja que sus manos hablen. Era genial con las manos. Podía reparar y construir casi cualquier cosa: cobertizos, mesas de picnic, una cabaña e incluso letrinas. Las letrinas obtendrían una decoración de puerta personalizada como un trébol o una media luna, cortada con su sierra de habilidad. Me deslumbraron estos adornos. A menudo, estas construcciones, que eran para parientes o vecinos, sirvieron como su forma sin palabras de expresar su cariño por ellos. 

Hay una gran foto de él sosteniendo la mano de mi hermana pequeña. Están de pie sobre un revoltijo de grandes rocas cerca de un río que se mueve rápidamente. Para mí es un claro ejemplo del tipo de protección y cuidado que encarnaba. Estaba perfectamente a salvo mientras sostuviera su mano. 

Cuando estaba en el último año de la escuela secundaria, mi padre falleció de cáncer. Aunque tuvimos algunos meses para prepararnos, su muerte lo cambió todo. Durante un tiempo mi madre no tuvo ingresos. Para mí, mis planes universitarios parecían estar en peligro. Un año después, en la universidad, escribí sobre la pérdida de mi padre y llegué a la conclusión de que necesitaba tomar la mano de Dios y seguir adelante. Así comenzó mi camino de conocer plenamente el cuidado y protección del Padre en mi vida. De hecho, puedo decir que realmente comenzó con aquellos que nos querían mucho cuando perdimos a mi papá. Eran las manos tangibles de Dios. 

Recientemente leí el libro de Tim Keller El Dios Pródigo (The Prodigal God). siempre había asumido pródigo significaba "descarriado", pero en realidad significa "gastar de manera extravagante o imprudente". El libro analiza la parábola de los dos hijos en Lucas 15, ambos perdidos en su propio camino. El hijo menor se perdió al desperdiciar su herencia. El hijo mayor también se perdió porque sirvió a su padre por deber, y no por amor, para obtener una recompensa. El padre en esta parábola ama a ambos hijos desinteresadamente y es un ejemplo de Dios Padre. Keller también enfatiza que Dios ha sido extravagante en Su provisión y cuidado por nosotros. Esto fue un poco difícil para mí de comprender. Entiendo a un padre que ama bien a sus hijos, pero es mucho más difícil para mí entender a un padre que es extravagante en su provisión. Incluso si mi padre tuviera los medios, no estoy segura de que hubiese habido regalos excesivos. Pero eso es lo que recibimos de Dios. Su sacrificio de Su Hijo por cada uno de nosotros es extravagante más allá de la comprensión. 

En el Salmo 73:23 el escritor habla de la intimidad de su relación con Dios: “Yo siempre estoy contigo; pues tú me sostienes de la mano derecha”. La historia de mi vida está llena de la sensación de que Dios me lleva de la mano en los momentos difíciles y también en los días buenos. La mano de Dios se menciona numerosas veces en las Escrituras. Estos pasajes enseñan acerca de Su liderazgo, justicia, poder, protección y provisión. La mano de Dios está activa en cada aspecto de nuestras vidas. Disfruto de innumerables bendiciones de Dios, una de las más grandes es mi esposo y mi familia. Pero sobre todo, es simplemente el regalo de la presencia de Dios y Su mano sosteniendo la mía lo que me ayuda a conocer Su generoso afecto por mí. 


ACERCA DE NUESTRA BLOGUERA

Linnea Tideman siempre ha disfrutado compartiendo historias. Su infancia en New Hampshire y su herencia sueca le han proporcionado una gran cantidad de experiencias, pero también la base de su fe. Le gustan los proyectos creativos, los viajes, los libros, la costura, la jardinería, pero sobre todo la hospitalidad, a menudo organiza elegantes tés y ocasionalmente algo grandioso como recrear la cena en el Titanic. Sirve en los ministerios de UrbanPromise y Good Neighbors. Linnea vive en Landenberg con su esposo Dave. Tienen tres hijas mayores. Ella espera que sus escritos reflejen cómo Dios continúa revelándose a nosotros como nuestro pastor y Salvador.

ACERCA DE NUESTRA TRADUCTORA

Ana León nació en México y emigró a los Estados Unidos a los 9 años. Vivía en Kennett Square, pero su familia se mudó a Delaware, donde Ana conoció a su novio de la secundaria con quien ha estado casada por más de 10 años. Son padres de dos niños, uno de 11 años y otro de 9 años. Ana ha traducido e interpretado profesionalmente por más de 11 años. Se unió a Willowdale En Español en el 2018 y es una de las intérpretes del servicio. En su tiempo libre le gusta ir a la playa, pintar, leer, y escribir. Ana está muy emocionada de ser parte del blog porque siente que es una forma para que las mujeres se conecten y sigan acercándose a Dios.

Intimo y Sencillo

Intimo y Sencillo

Si hay algo que siempre me provoca ansiedad, me pone nervioso y me hace sudar, es la idea de tener que compartir mi fe con alguien. ¿Y si digo algo equivocado? ¿Y si no es perfecto? ¿Y si se me escapa algo? Es intimidante y me da miedo, y la mayoría de las veces intentó evitarlo. Pero la cosa es, cuando miramos el ejemplo de Jesús en la Biblia, cuando Él comparte el Evangelio, no es intimidante y atemorizante. Es íntimo y sencillo.

El terreno resbaladizo del Alcoholismo

Tomando prestado del saludo de una reunión de recuperación: “Hola, mi nombre es Bonnie y soy nieta de dos alcohólicos (ambos lados del árbol genealógico), hija de un alcohólico, hermana de un alcohólico y tía de un alcohólico. ” El alcoholismo es fuerte y profundo en mi árbol genealógico. Como dice el antiguo proverbio: “Allí, pero por la gracia de Dios, voy yo”. ¡Lo digo literalmente! Si no hubiera encontrado a Jesús a los 13 años, creo que yo también hubiera estado en ese número.

De hecho, me convertí en una consejera licenciada profesional debido a una sesión familiar en un centro de rehabilitación de alcohol para pacientes internados al que asistía para mi hermana en 2008. Durante esa sesión en la que hablábamos del efecto que el alcohol tenía en su vida (y en nuestra vida como familia), me di cuenta de que esto era lo que quería hacer. Quería usar las experiencias por las que Dios me había guiado para ayudar a otros.

Debido a que mayo es el Mes de la Concientización sobre la Salud Mental, quiero aprovechar esta oportunidad para hablar sobre lo que el DSM-5-TR (texto de la Asociación Estadounidense de Psicología sobre enfermedades mentales) llama “Trastornos por Abuso de Sustancias” y más específicamente el alcoholismo. De acuerdo con el Centro Nacional de Estadísticas de Abuso de Drogas, 1 de cada 10 estadounidenses de 12 años o más tiene un trastorno por consumo de alcohol (14.8 millones de estadounidenses).

La gente bebe por una variedad de razones. A menudo comienza por placer y/o para aliviar el estrés. También se usa comúnmente como un medio de automedicación para la ansiedad y la depresión. Muchas personas usan el alcohol como mecanismo de supervivencia. Esto se hizo muy obvio durante la pandemia de Covid-19 cuando las ventas de licor aumentaron 54% año tras año.

Nadie comienza queriendo convertirse en alcohólico. Todos creen que pueden controlarlo. El problema es que el alcoholismo es una enfermedad progresiva. Permitir que el alcohol o las drogas se conviertan en su mecanismo de afrontamiento es un terreno resbaladizo. Puede convertirse en una muleta para hacer frente a los problemas y, como sabemos, siempre hay problemas. Es como el dicho que he visto en las camisetas: "Solo bebo los días que terminan en Y". Cuando usa el alcohol como una estrategia de afrontamiento, estará bebiendo más dentro de un año que hoy. Al igual que el cáncer, si no se controla, continúa creciendo hasta que finalmente acaba con la vida del individuo.

Como lo demuestra mi árbol genealógico, el alcoholismo y el trastorno por consumo de alcohol son altamente genéticos. Es a la vez "raza y pastura": genética y medio ambiente. Esto no significa que esté condenado a heredarla, pero sí significa que debe ser extremadamente consciente de su predisposición si está en su linaje.

En las últimas décadas, el consumo social de alcohol ha crecido dentro de nuestro país y en nuestras iglesias. Aunque luché por encontrar estadísticas exactas, sé (como terapeuta) que el alcoholismo también está presente en las comunidades Cristianas. Incluso las personas que conocen a Jesús pueden luchar contra el trastorno por abuso de sustancias. Cualquiera puede caer en esta trampa.

El problema es que cuando recurrimos a cualquier cosa además de Dios para hacer frente a nuestros problemas, a menudo es una receta para el desastre. Cuando confiamos en la "solución rápida" del alcohol u otra sustancia para "salvarnos" en lugar de Dios, estamos abriendo una puerta para un desastre potencial. Como muchos trastornos de salud mental, hay mucha vergüenza asociada con esto. Si bien creo firmemente que Dios es suficiente para ayudarnos a superar toda la variedad de problemas de salud mental, a menudo también se necesitan otros tipos de tratamiento.

¿Cómo sabe si su consumo de alcohol se ha convertido en un problema? En consejería, a menudo usamos la evaluación CAGE. Las preguntas representadas por el acrónimo CAGE (ver palabras remarcadas a continuación) son:‌

  1. ¿Alguna vez ha sentido que debe “reducir” su consumo de sustancias?

  2. ¿La gente lo ha “molestado” al criticar su consumo de sustancias?

  3. ¿Alguna vez se ha sentido mal o “culpable” por su consumo de sustancias?

  4. ¿Alguna vez ha usado una sustancia a primera hora de la mañana para calmar sus nervios o comenzar el día (para abrir los “ojos”)?

Por lo general, responder "sí" a dos o más preguntas sugiere que es posible que tenga una dependencia de sustancias.‌‌ Si es usted o su ser querido, le recomiendo encarecidamente que busque ayuda. Considerar Celebre la recuperación o AA o Al-anon (para las familias de los que luchan). Considera la terapia.

Si vive con una persona con un trastorno por abuso de sustancias, le insto a que busque ayuda. Esta enfermedad afecta a todos en la casa. Incluso si usted no es el que tiene el problema, aprender los principios para hacer frente a esta enfermedad es igualmente importante. Criar niños en un hogar alcohólico deja una huella duradera en sus vidas, incluso si no la ves. Además de las adicciones, existen rasgos específicos de los hijos adultos de alcohólicos: codependencia, perfeccionismo, agradar a las personas y juzgar, por nombrar algunos. He pasado mi vida tratando de desaprender los hábitos poco saludables en los que me crié. Crecer en este entorno afecta a todos.

Recientemente me encontré con estos versículos en el Salmo 66:10-12:

Porque Tú, nos has probado, oh Dios; 

  nos has refinado como se refina la plata.

 Nos metiste en la red;
    carga pesada pusiste sobre nuestros lomos;
 Hiciste cabalgar hombres sobre nuestras cabezas;
    pasamos por el fuego y por el agua;
Pero Tú nos sacaste a un lugar de abundancia.  

Para mí, esto dice que Dios nos ayuda a superar las cosas difíciles de la vida y, al final, nos lleva a un lugar de abundancia. Él hace nuevas todas las cosas. Él es fiel. Creo que Él usa las situaciones difíciles de nuestra vida para nuestro crecimiento y para que también podamos ayudar a otros, pero más importante aún, para que podamos darle la gloria a Él (2 Corintios 1:3-4).

Ya sea que estés sufriendo de adicción o estés viviendo con alguien que lucha, Dios te ve. Reclama la promesa de Jeremías 29:11 (NVI): Porque yo sé los planes que tengo para ustedes”, afirma el Señor, “planes de bienestar y no de calamidad, a fin de darles un futuro y una esperanza”. 


ACERCA DE NUESTRA BLOGUERA

Bonnie Kotler y su esposo Mitch tienen dos hijas, tres hijos, cuatro nietos y tres perritos. Fue ama de casa durante muchos años antes de regresar a la fuerza laboral después de recibir su Maestría en Consejería y Relaciones Humanas de la Universidad de Villanova. Ella es una consejera profesional licenciada en The Peacemaker Center y en su consultorio privado, True North Counseling. Bonnie ha estado en el equipo de enseñanza del ministerio de mujeres de Willowdale desde 2012. Los estudios Bíblicos han sido una parte importante en su caminar como creyente, y a su vez, le encanta ayudar a otras mujeres a encontrar la paz con Dios y crecer en su fe. Le gusta escribir material para el estudio Bíblico, leer ficción, pasar tiempo con la familia y hacer cualquier cosa bajo el sol. A Bonnie le encanta reír y considera que la risa es la mejor medicina. Salmo 126:2

ACERCA DE NUESTRA TRADUCTORA

Ana León nació en México y emigró a los Estados Unidos a los 9 años. Vivía en Kennett Square, pero su familia se mudó a Delaware, donde Ana conoció a su novio de la secundaria con quien ha estado casada por más de 10 años. Son padres de dos niños, uno de 11 años y otro de 9 años. Ana ha traducido e interpretado profesionalmente por más de 11 años. Se unió a Willowdale En Español en el 2018 y es una de las intérpretes del servicio. En su tiempo libre le gusta ir a la playa, pintar, leer, y escribir. Ana está muy emocionada de ser parte del blog porque siente que es una forma para que las mujeres se conecten y sigan acercándose a Dios.

¿Somos suficientemente buenas?

Un mensaje que he escuchado repetidamente en las redes sociales, en comentarios escritos e incluso en charlas de líderes cristianos es que "tú eres suficiente", mientras que algunos incluso van más allá y dicen "tú eres lo suficientemente buena."

Cuando se toma con un poco de prudencia, entiendo el mensaje de que no tenemos que rendir al nivel de otra persona para ser dignas de amor - somos "suficientes" tal como somos. Pero, aun cuando escribo esto, no me siento bien conmigo misma, porque veo el pecado en mi corazón, pensamientos y acciones y no los veo como un requisito o un impedimento para ser amada. 

Si lo miramos desde una perspectiva moral, ser "lo suficientemente buena" implica que hay una norma, y las Escrituras nos proponen una norma moral clara: la perfección. Entonces, ¿somos lo suficientemente buenos para cumplir esa norma?

Como sucede a menudo, las canciones que pongo a mis hijos les transmiten la verdad de forma clara y sencilla. Esta vez es “Only Jesus” by Shai Linne.

"Adán no era lo suficientemente bueno
Noe no era lo suficientemente bueno
Abram no era lo suficientemente bueno

Sólo Jesús

Isaac no era lo suficientemente bueno
Jacob no era lo suficientemente bueno

José no era lo suficientemente bueno

Sólo Jesús

Moisés no era lo suficientemente bueno

Josué no era lo suficientemente bueno

Samuel no era lo suficientemente bueno

Sólo Jesús

David no era lo suficientemente bueno

Daniel no era lo suficientemente bueno

Jonás no era lo suficientemente bueno

Sólo Jesús".

Adán siguió la decisión de Eva de rebelarse contra Dios y fueron expulsados del Jardín del Edén. 

Noé se avergonzó de sí mismo mientras estaba borracho y acabó maldiciendo a su nieto como consecuencia de esa situación. 

Abram decidió jugar a ser Dios en lugar de caminar en obediencia.

Isaac mintió al rey diciendo que su mujer era su hermana.

Jacob engañó a Isaac y robó la herencia de su hermano.

Los pecados de José no son realmente evidentes en el relato bíblico de su vida, pero ¿fue lo suficientemente bueno?

Moisés cometió asesinato.

Josué tuvo momentos en los que cuestionó la promesa de Dios.

Samuel guio fielmente al pueblo de Dios y dedicó su vida a servir al Señor, pero ¿era lo bastante bueno?

David dejó que la lujuria controlara su mente y sus acciones, lo que acabó con la muerte de un inocente.

Daniel hizo frente a Nabucodonosor y se enfrentó a la muerte por el Señor, pero aun así escribe que confesó sus propios pecados - ¿fue lo suficientemente bueno?

Jonás se negó a seguir las instrucciones de Dios y fue un misionero renuente.

Por supuesto, la lista de este grupo de personajes ejemplares no representa la totalidad de las vidas de estos hombres. Muchos de ellos son estimados por el Señor a lo largo de la Escritura y son grandes ejemplos para nosotras de cómo vivir fielmente al Señor, confesando y afrontando nuestros pecados y siguiendo adelante para continuar persiguiendo el plan de Dios. 

Pero sólo Jesús fue lo suficientemente bueno como para no requerir un sacrificio adicional de expiación. Sólo el sacrificio de Jesús cubre todos nuestros fracasos y rebeliones. 

Mary Beth no era lo suficientemente buena (ni siquiera cerca de serlo). 

Es una buena noticia que no soy lo suficientemente buena porque nunca podré serlo según el estándar de la perfección de Jesús, excepto que Dios elija mirar a Jesús mismo y ver Su justicia en lugar de mi pecado. ¡Qué gracia!

¿Debo seguir pecando para que aumente la gracia? De ninguna manera. (Romanos 6:1) Aunque nunca seré lo suficientemente buena, no huyo de toda bondad porque carezca de perfección. Al contrario, consigo ser cada vez más como Jesús -más buena- cuanto más tiempo camino con el Señor. Pero nunca lo suficientemente buena, porque sólo Jesús es. 

"Soy mucho peor de lo que imagino y más amada y aceptada por Dios de lo que nunca me atreví a esperar". Tim Keller


ACERCA DE NUESTRA BLOGUERA

Originaria de Georgia, Mary Beth Gombita es una amante del té dulce, una orgullosa Bulldog de Georgia y una ávida fanática de la música. Trabaja en el sector de las relaciones públicas y dirige su propio negocio de consultoría de comunicación desde casa. Mary Beth y su marido, Stephen, tienen dos hijos pequeños. Actualmente es la editora de nuestro blog Willowdale Women.

ACERCA DE NUESTRA TRADUCTORA

Silvia Cubos nació en la ciudad de México, y se crio en la ciudad de Toluca, es la mayor de 5 hermanos. Estudió comunicación y después de graduarse llegó a este país en 1996 donde tuvo la oportunidad de estudiar Ingles y Educación temprana. Silvia ha trabajado como maestra, interprete y trabajadora social. Desde los 17 años Silvia ha sentido el llamado de servir al Señor y orar por las necesidades de otros, ahora lo hace en Willowdale en Español desde 2019. Silvia disfruta cocinar comida mexicana, caminar al aire libre con sus dos hijas y su perro; para terminar el día le gusta disfrutar de un helado de fresa.

Gloria en la Monotonía: Una oración para los Aburridos, Cansados o Marchitos

Gloria en la Monotonía: Una oración para los Aburridos, Cansados o Marchitos

Tú conoces mi corazón, así que sabes que estoy luchando por encontrar la alegría en esta temporada de la vida. Me siento atascada, arrastrándome por este desierto sin final a la vista. Busco desesperadamente significado y propósito en días que parecen largos y mundanos. Tengo sueños para mi vida que parecen más grandes que el lugar donde me despierto. Lucho con la decepción de lo que es y de lo que aún no ha llegado.

Cómo ayudar a quienes sufren emocionalmente

Cómo ayudar a quienes sufren emocionalmente

Después de haber vivido el trauma de un matrimonio verbal y emocionalmente abusivo y el consiguiente caos que creó el liberarme, he tendido a evitar situaciones similares en la vida de los demás a toda costa. Solo la recuperación de ese momento de mi vida fue una de las cosas más difíciles que tuve que hacer. Pero le prometí al Señor que le obedecería en Su promesa de convertir las cenizas rotas y sucias de mi vida en algo hermoso que lo honre.

Rotas y ensangrentadas

Rotas y ensangrentadas

No se nombra a la mujer, pero su hermosa historia se recoge en Mateo, Marcos y Lucas. La historia me ha conectado como pocas. Se le conoce como la mujer de la hemorragia. No es un tema bonito. También puede ser difícil hablar de él con franqueza en un sermón. Pero nosotras, como mujeres, podemos sentirnos identificadas... y su historia merece una mirada más atenta.

Un vistazo a mi viaje de fe

A los ocho años llevaba los pantalones demasiado altos, calcetines enrollados y el pelo muy corto. 

También fue cuando decidí hacer de Jesús el Señor de mi vida. 

Recuerdo que era primavera. El cielo era de un azul brillante y el sol brillaba. Había una ligera brisa y los pájaros trinaban. Yo estaba afuera con mi mamá y mi papá plantando flores en los canteros. No recuerdo exactamente lo que dije, pero empecé a hacer preguntas sobre Dios y la eternidad. Mi madre me preguntó si quería que Jesús fuera el Señor de mi vida y le dije que sí. Hizo venir a mi padre, nos arrodillamos en el césped y me guiaron en una oración que cambiaría mi vida para siempre. Reconocí que había pecado y que sólo la sangre de Jesucristo, que murió por mis pecados, podía salvarme. Le pedí que entrara en mi corazón y fuera el Salvador de mi vida.  Me convertí en una nueva criatura mientras plantábamos nuevas flores en la creación de Dios. "Así que, si alguno está en Cristo, nueva criatura es; las cosas viejas pasaron, las nuevas han llegado". 2 Corintios 5:17

Enseguida quise llamar a mis abuelos para contarles mi decisión. Estaba tan emocionada. Recuerdo que les dije que me sentía tan ligera... ¡como una mariposa!

Recuerdo aquel día y sonrío ante mi fe infantil, ajena a los altibajos que inevitablemente me depararía la vida. Uno de esos momentos difíciles ocurrió cuando estaba en la universidad. Acababa de regresar de un verano en Guatemala y empezaba mi tercer año en una universidad cristiana. Lo que había experimentado en Guatemala me había sacudido y desafiado mi visión del mundo. Empecé a cuestionar todo lo relacionado con mi fe y decidí que si no sabía por qué hacía algo, como leer la Biblia, orar, ir a la iglesia, etc. - no lo iba a hacer. Esto era difícil, ya que la Iglesia era obligatoria tres veces a la semana, e irónicamente yo estaba tomando una clase de evangelismo y alcance global. Cumplía con esos compromisos, pero en realidad no participaba. Estaba enfadada, resentida e inquieta. Quería respuestas a algunas de las grandes preguntas de la vida y no era fácil encontrarlas. 

Seguí luchando con mi fe y el verano después de la graduación de la universidad, no sabía lo que quería hacer a continuación, pero Dios tenía un plan. Lo siguiente que Él tenía en mente para mí era un viaje misionero de ocho meses a Venezuela que venía con diez semanas de entrenamiento de discipulado de antemano. Recuerdo que me preguntaba cómo iba a funcionar eso. "Realmente no sé en qué creo, pero claro, hagamos un compromiso de un año con una organización cristiana...". Pero, alerta de revelación, Dios sabía lo que estaba haciendo. Comencé el entrenamiento de discipulado con una mala actitud, pero pronto descubrí que mis grandes preguntas eran bienvenidas y alentadas. Me sentí libre para expresar las pesadas reflexiones que agobiaban mi corazón. Y poco a poco Dios comenzó a tomar mi ira, resentimiento e inquietud y los cambió por paz. No tenía todas las respuestas -todavía no las tengo- y no hubo un gran momento de compromiso o dedicación emocional. Fue un cambio gradual, pero salí del otro lado con mi fe intacta, aunque con una fe que parecía y se sentía diferente. Era una fe auténtica y natural. Por primera vez, mi fe no era la de mis padres o amigos, era la mía propia.

Si tienes preguntas y dudas, no las evites. No las ignores ni las rechaces. Tráelas a Dios. Háblalo con un guía o pastor creyente. No estás solo, y pronto descubrirás que a medida que expreses aquello con lo que estás luchando, Dios te encontrará donde estás. Tu fe se volverá más genuina. Hay una libertad en eso y es poderoso. 

Hay muchas más historias que podría compartir, pero esto te da una idea de mi camino de fe. 

Para terminar, he aquí algunos de mis versículos favoritos a los que acudo cuando experimento las montañas y los valles de la vida. Espero que te animen hoy. 

  • Cristo nos libertó para que vivamos en libertad. Por lo tanto, manténganse firmes y no se sometan nuevamente al yugo de esclavitud.. (Gal 5:1) 

  • Ahora bien, el Señor es el Espíritu, y donde está el Espíritu del Señor, allí hay libertad. Así, todos nosotros, que con el rostro descubierto reflejamos como en un espejo la gloria del Señor, somos transformados a su semejanza con más y más gloria por la acción del Señor, que es el Espíritu. (2 Cor.3:17-18) 

  • Pues estoy convencido de que ni la muerte ni la vida, ni los ángeles ni los demonios, ni lo presente ni lo por venir, ni los poderes, ni lo alto ni lo profundo, ni cosa alguna en toda la creación podrá apartarnos del amor que Dios nos ha manifestado en Cristo Jesús nuestro Señor. (Rom 8:38-39) 

  • Porque como la altura de los cielos sobre la tierra, así es de grandiosa su misericordia sobre los que le temen. Tan lejos como está el oriente del occidente, así hizo alejar de nosotros nuestras transgresiones. (Salmo 103:11-12) 


ACERCA DE NUESTRA BLOGUERA

Danielle (Dani) Rupp creció en un pequeño pueblo de Ohio y es una verdadera fanática de los Buckeyes, aunque trata de no ser odiosa al respecto. En 2011 llegó a Pensilvania para obtener su Maestría en Trabajo Social. Después de la graduación Dani aceptó un puesto como terapeuta de salud mental para niños y adolescentes en Coatesville. También fue niñera durante varios años. Durante ese tiempo vivió en Kennett Square y asistió Willowdale Chapel. Regresó hace varios años del sur de Asia, donde aprendió a tolerar la comida picante y a cruzar las carreteras sin ser atropellada, además de ser voluntaria en la Misión Internacional de Justicia en su Departamento de Atención Posterior. En su tiempo libre, Dani disfruta de ir a viajes misioneros/viajes, correr, leer, y conectarse con sus seres queridos-preferiblemente con un café y un dulce.

ACERCA DE NUESTRA TRADUCTORA

Liliana Daza es la hermana mayor de 4 hijas de una familia colombiana muy conservadora. Oriundos de un pequeño pueblo ubicado en el Oriente de Colombia en frontera con Venezuela donde creció y pasó su niñez. Luego se mudó a la capital para terminar sus estudios superiores en el área de tecnología. En el año 2011 se trasladó a los Estados Unidos junto con su familia debido a una oportunidad laboral. Desde temprano, Liliana ha sentido un llamado para servir y apoyar a la comunidad, por lo que aprovecha cada oportunidad que Dios pone en su camino para este propósito. Liliana disfruta de un buen café negro, viajar, comer buena comida, especialmente cuando viaja. Liliana hace parte de la Iglesia Willowdale en español casi desde sus inicios.

3 Mitos Habituales Sobre la Semana Santa

3 Mitos Habituales Sobre la Semana Santa

La Pascua no es todo brillo, vestidos, golosinas y caramelos de chocolate. Aunque hay grandes motivos de celebración, el verdadero regocijo de la Pascua sólo puede venir apreciando la muerte que la precedió. Pasarla por alto con bonitas flores de primavera y desbordantes canastas de Pascua no es darle a nuestro Señor lo que le corresponde. No es por ser una Debbie Downer, pero debemos considerar "cuánto costó, ver mi pecado en la cruz".

Cuando más de Jesús significa más dificultad

Durante la Cuaresma de este año me he centrado en buscar más a Jesús en mi vida diaria. Al moverme por la casa, al conducir mi coche, en mis conversaciones, al disciplinar a mis hijos, al escuchar a mis amigos. Sentí la necesidad no de renunciar a algo, sino de dar más espacio a la razón por la que reconocemos esta época del año.

Lo primero que empecé a añadir a mi rutina fue meditacion y oracion en silencio, alabando a Dios por lo quien es. A veces me encuentro despierta en la cama o levantándome temprano y simplemente sentada en la quietud. A menudo recito salmos en oración:

"Te amo, Señor, fortaleza mía.

El Señor es mi roca, mi fortaleza y mi libertador,

mi Dios, mi roca, en quien me refugio,

mi escudo, y el cuerno de mi salvación, mi baluarte.

Invoco al Señor, que es digno de alabanza.

Salmos 18:1-3

Estas descripciones de lo asombroso que es el Dios y Salvador al que servimos me hicieron darme cuenta de lo increíble que es Él en verdad. Qué hermoso canto nos ofrece el autor, David, para alabar a Dios. Cuanto más leo este Salmo una y otra vez, más me detengo en una palabra que describe a Dios y dejo que resuene en mi corazón.

Sigo meditando, leyendo la Biblia y cantando a Dios, pero, si soy sincera, a veces me siento vacía. Es como si los versículos me miraran fijamente, sin sentido, a través de mi mundanidad. Ha habido días en los que he clamado pidiéndole que me atrajera más profundamente. Quería experimentar a Jesús de una manera nueva.

Y sabes que cuando pides, Dios siempre aparece, pero no necesariamente de la forma que esperas.

Tengo cinco hijos. Sus edades oscilan entre los ocho y los diecisiete años: cuatro chicas y un chico. Fue necesaria una situación muy difícil en las últimas semanas con uno de ellos para que yo viera "más de Jesús" de una manera que ni siquiera esperaba.

Sin entrar en detalles, sólo diré que la situación era sombría, y oré y supliqué a Dios que obrara y se moviera para Su gloria y nuestro bien. Estuve fuera durante el fin de semana en el IF Gathering, una conferencia de mujeres cristianas en Dallas, donde había un montón de grandes oradores e maravillosa música de alabanza y adoración. Cuando llegué allí, estaba entumecida por el miedo y la desesperanza. Envié un mensaje de texto a mis amigas de estudio Biblico para que oraran por la circunstancia, y recibí aliento y oración de ellas. Comenzó la conferencia, y en cuanto empecé a ofrecer alabanzas a Dios, sentí Su presencia, pidiéndome que confiara en Él, escuchando Su oferta de protección y Su fidelidad. Con fe, le entregué la circunstancia a Él. Hubo muchas súplicas, pidiendo ayuda y suplicando misericordia. Sabía que tenía que confiar en Él sin saber cuál sería el resultado para mi familia. Apoyándome plenamente en Él, ore constantemente ese fin de semana.

Volé a casa desde la conferencia y tan pronto como bajé del avión, Dios comenzó a revelar Su inmerecido favor a mi hijo. Cada escenario que ha surgido de esta horrible circunstancia ha sido otra instancia de Dios mostrándose y revelándonos que Él es el Dios que redime lo malo. Él toma nuestros errores y fracasos y los convierte en algo de lo que podemos aprender, crecer, mientras le damos a Él la gloria que se merece. Comencé a ver el perdón de Jesús delante de mis ojos y vi cómo incluso en nuestros valles, Él está allí. Mi hijo y yo vimos ante nuestros ojos la redención ofrecida que no merecemos.

Todavía estoy asombrada de cómo Él obró. No he dejado de compartir con cualquiera que me escuche. Este deseo de "más de Jesús" no sólo significó más Jesús en mi vida, sino también una oportunidad para mí de testificar de cómo Él obró en nuestra familia. Fue una oportunidad para mí de regalar la gracia, el amor y la misericordia de Dios.

A medida que nos acercamos a la Pascua, sigo recordando en mi vida y lo veo en cada uno de mis hijos, cuánto necesitamos a Jesús. Somos pecadores caídos tan necesitados de Su gracia. ¿No estamos agradecidos de que Él asumiera el castigo que merecemos?

Como aprendí, "más de Jesús" no significa que no veremos pruebas. Pero Juan 16:33 promete que Él ya ha vencido al mundo y estará con nosotros. 

Espero mantener estas meditaciones en silencio como parte de mi práctica espiritual diaria, y te animo a que te unas a mí en la búsqueda de maneras de añadir más de Jesús en tu vida, ¡sea lo que sea que eso signifique para ti!

Si estás pasando por un momento difícil, otra manera de encontrar "más de Jesús" es acercarte al equipo de diáconos de Willowdale Chapel o a un amigo cercano y pedirles que oren contigo sobre tu circunstancia para apoyarte en tu dificultad. No estamos hechos para ir solos por la vida. El aliento del cuerpo de Cristo para señalarnos a nuestro Dios nos da más de Jesús también. 


 ACERCA DE NUESTRA BLOGUERA

Veenema y su esposo, Jeremy, aman explorar el condado de Chester con sus dos hijas biológicas mayores y sus tres hijos adoptados. Susan ha estado en la educación durante casi 20 años apoyando a los niños con discapacidades y sus familias. Actualmente trabaja en el Departamento de Educación. Una de sus mayores alegrías es dirigir el estudio bíblico de mujeres los jueves por la noche y su grupo comunitario de parejas. La gente es su pasión. Le encanta leer, escribir y estudiar todo, desde la historia hasta las ciencias sociales y la iglesia primitiva. Siempre encontrará a su lado a su fiel perro German Shorthaired Pointer.

ACERCA DE NUESTRA TRADUCTORA

Maritza Zavala Smith nació en Guanajuato, México, y se trasladó a los Estados Unidos cuando tenía siete años. Estudió Salud Pública en Penn State, donde conoció a su esposo. Llevan 8 años casados y tienen dos niños gemelos y una bebe. A Maritza le encanta viajar y bailar salsa. Cuando no está deleitándose con el té verde matcha con leche y estando al aire libre con sus seres queridos, puedes encontrarla aventurándose con su tribu a través de los libros.

Mientras Tanto

Estoy en una temporada de espera. He estado aquí por un tiempo. Y me estoy impacientando.

En realidad, creo que he pasado la impaciencia. La impaciencia era una hoja de cálculo con más de cien solicitudes de empleo. La impaciencia fue asistir a mi vigésima tercera boda sin un acompañante. La impaciencia fue sollozarle a mi mamá por teléfono mientras estaba sentada en mi auto en la oscuridad porque estaba tan cansada de la palabra no.

No sé la palabra para donde estoy ahora. Algunos días - muchos, en realidad - son esperanza. Paz. Contentamiento. Alegría.

Estos son los días en los que vivo sabiendo que fui hecha con temor y perfectamente amada por un Dios que dio a su Hijo unigénito para salvar mi alma del pecado y la muerte. Son los días en que el sol calienta mi cara y el té de burbujas llena mi vientre y un niño que amo se acurruca contra mi pecho.

Pero hay otros días. Días en los que la esperanza se desvanece y la paz se siente lejana y la alegría se filtra por las grietas de mi corazón con otra publicación de compromiso. Días en los que la alegría parece un sueño lejano, un vago recuerdo de la infancia flotando fuera de nuestro alcance.

Estos días se sienten como de desánimo. Soledad. Dolor. Enojo. Confusión. Siestas que duran más de lo debido y dos dígitos en mi cuenta bancaria y titulares de noticias que me revuelven el estómago.

Estos son los días feos. Días como David acurrucado con frío y miedo en una cueva donde cada ruido podría ser un hombre ansioso por clavar una lanza en su corazón. Días como Moisés pastoreando ovejas en el desierto y tratando de olvidar al hombre que asesinó. Días como los israelitas quejándose del sabor del maná cuando podrían estar festejando en Egipto.

(Puede haber habido marcas de latigazos en sus espaldas, pero al menos tenían carne).

Estos son los días de entretanto. Los días entre ya y todavía no. Su reino está aquí, pero no completamente.

Y así, en estos días intermedios, lloramos. Nos endeudamos. Tragamos pastillas. Nos sentamos en bancos en los funerales. Leemos libros escritos por padres que perdieron a sus hijos a causa de la violencia armada. Gritamos "¿Por qué?" a un Dios que dice que es bueno pero aún permite que nuestros corazones se rompan.

Cuando me tomo el tiempo para realmente sentarme en la pesadez del mundo, a veces me siento culpable por las lágrimas que he derramado por cosas que parecen tan pequeñas en comparación. Puede que no tenga esposo, pero no estoy huyendo por mi vida de un gobierno que odia mi fe. Y es cierto que a veces es bueno darnos una buena dosis de perspectiva.

Pero cuando abro mi Biblia en ese segundo librito de Pedro, las palabras que veo allí dicen que eche mis preocupaciones sobre Él porque Él se preocupa por mí.

No hay ninguna advertencia sobre la palabra 'preocupaciones'. No dice "echa tus preocupaciones sobre Él, sino solo las que son lo suficientemente importantes como para ser cubiertas en una importante cadena de noticias".

Esto significa que el Dios que se preocupa por los refugiados ucranianos también se preocupa por la lista de reproducción de bodas que hice que se llama "quizás algún día", la que hace que me duela un poco el corazón cada vez que la escucho. Al Dios que se preocupa por los grandes problemas del mundo le importa que me sienta frustrada porque la vida es corta y deseo mucho que este tiempo importe, pero pasar siete horas al día detrás de un escritorio no es lo que tenía en mente.

Me consuela saber que Dios no me desconecta en los días en que la canción de mi alma no se parece en nada a la gratitud. Se acerca, se sienta con las piernas cruzadas en la cama a mi lado y sostiene una botella para “recoger todas nuestras lágrimas”, como nos dice el Salmo 56:8. Todos ellos. No solo los que considera lo suficientemente nobles.

No me arrebata la botella para que las lágrimas que lloro por la muerte de Bing Bong en Del Revés (Inside Out) no se confundan con las que lloro por mis amigos que no lo conocen.

Él quiere todas mis preocupaciones. Todas mis lágrimas. Todas mis preguntas.

¿Dónde estás, Dios? ¿Por qué les diste una boda y me dejaste atrás? ¿Por qué mi “buen plan” parece vivir de cheque en cheque? ¿Por qué dejaste que ocurriera otro tiroteo en la escuela?

Su respuesta no suele ser la que yo quiero. No es una lista ordenada de formas en que todo el quebrantamiento del mundo va a ser redimido. No es una revelación divina de un camino de cinco pasos que puedo tomar para llegar a donde quiero estar. No es la curación instantánea de todas las heridas visibles e invisibles que llevo como un saco de arpillera lleno de piedras.

A veces, la respuesta que realmente quiero es que Él se materialice en la carne para poder envolverme en sus brazos y decirme que todo estará bien.

Esto también está por suceder.

En cambio, Su respuesta suele ser algo como esto:

Te amo. Estoy contigo. Yo soy para ti. Nunca te dejaré. Sé tu nombre. Conozco tu corazón. Puedes confiar en mí.

Y recientemente, así es como suena Su respuesta:

Corderito, búscame. Yo también estoy en mientras tanto.

Así que estoy aprendiendo a mirar. Lo busco en las mariposas que revolotean por el jardín fuera del lugar donde trabajo. En el amanecer que hace que mi cocina brille cálida y roja mientras preparo el desayuno. En el rostro de una niña que me sonríe mientras le entrego un libro de la biblioteca. En la risa de un grupo de mujeres que no puedo creer que tuvo la amabilidad de darme como amigas.

No hago esto perfectamente. Todavía tengo días de habitante de cuevas en los que rechazo el milagro del maná. Todavía rezo por la oportunidad de caminar por el altar con mi papá, para encontrar un trabajo que me permita pasar mis días haciendo lo que siento que fui hecha para hacer. Todavía lucho por creer en la bondad de Dios cuando la espera dura más de lo que jamás pensé que sería.

Pero incluso en esos días, cuando el cielo está gris y los ojos se nublan por las lágrimas y es un poco más difícil ver todos Sus dones, me aferraré a las palabras que Él escribió para mí.

“¡Mira, estoy haciendo algo nuevo! Ahora brota; ¿no lo percibes? Voy a abrir un camino en el desierto y arroyos en la tierra baldía”.

Arroyos en el páramo. ¿Escuchas eso? Está abriendo camino, aquí y ahora.

Se abre camino en esos largos días que se arrastran hasta las noches de insomnio.

Se abre paso en cambios de pañales, inyecciones de insulina, niños que no llaman a casa. En sillas de ruedas, salas de espera, sillas vacías en mesas de cocina. En costos crecientes, préstamos estudiantiles, ojos solitarios sobre máscaras de papel.

Se abre camino en las promesas incumplidas. Familias rotas. Sueños rotos. Huesos rotos.

Jesús está abriendo camino para hacer nuevas todas estas cosas. Gracias a Él, cada lágrima que lloramos tiene un propósito. Gracias a Él, nada se desperdicia en el desierto.

Gracias a Él, incluso nuestro mientras tanto puede ser hermoso.

Música sugerida: Todas mis preguntas ( All My Questions) es un hermoso álbum de lamento de Bethany Barnard, alguien que ha caminado por caminos de dolor y enfermedad mental pero continúa proclamando la bondad de Dios mientras es honesta sobre su dolor. Su canción “Lágrimas en Su Cara” (“Tears On Your Face") pinta una imagen conmovedora de Jesús llorando con sus hijos.


ACERCA DE NUESTRA BLOGUERA

Kati Lynn Davis creció en el condado de Chester. Tras una breve estancia al otro lado de Pensilvania para obtener un título de escritora en la Universidad de Pittsburgh, regresó al área y consiguió un trabajo en una biblioteca local. Cuando no está escribiendo, a Kati le gusta leer, dibujar, ver películas (¡especialmente de animación!), beber té de burbujas, pasear con sus gatos y salir a correr muy despacio. Kati está bastante segura de que es un Eneagrama 4, pero constantemente tiene una crisis de identidad al respecto, así que afortunadamente está aprendiendo a arraigar su sentido del ser en Jesús.


ACERCA DE NUESTRA TRADUCTORA

Ana León nació en México y emigró a los Estados Unidos a los 9 años. Vivía en Kennett Square, pero su familia se mudó a Delaware, donde Ana conoció a su novio de la secundaria con quien ha estado casada por más de 10 años. Son padres de dos niños, uno de 11 años y otro de 9 años. Ana ha traducido e interpretado profesionalmente por más de 11 años. Se unió a Willowdale En Español en el 2018 y es una de las intérpretes del servicio. En su tiempo libre le gusta ir a la playa, pintar, leer, y escribir. Ana está muy emocionada de ser parte del blog porque siente que es una forma para que las mujeres se conecten y sigan acercándose a Dios.

Lecciones del arroyo

En los últimos años me he esforzado por explorar la mayor parte de la Reserva White Clay Creek. Los senderos son inmensos y se extienden más allá de lo que nunca había imaginado.  Estoy agradecida por este espacio tan cercano a donde vivimos; no sólo por los increíbles senderos, la belleza y la paz que proporciona, sino por las lecciones que me ha enseñado al explorar las corrientes envolventes del arroyo. Nunca deja de sorprenderme. En cada visita hay algo nuevo y diferente. Por ejemplo, una lección que aprendí de estas fotos.  

Siempre me asombra cómo el arroyo pasa de estar tranquilo y aparentemente quieto a ser ruidoso, de aguas turbulentas, y luego de nuevo... Quiero decir, sé POR QUÉ sucede esto - la profundidad o la dirección cambian, algo bloquea el camino, etc. pero aún así, ¿no es así la vida?  Mientras la recorremos, tenemos momentos de calma, paz, felicidad; luego, de repente, un árbol cae en nuestro camino y nos encontramos con el caos, el ruido y las prisas. El miedo nos envuelve y apenas podemos respirar.

A veces no es la tierra la que dirige el agua. A veces llueve a cántaros. El agua se precipita constantemente, desbordándose por donde no debe, cambiando y posiblemente destruyendo el paisaje que la rodea.  Pero pronto dejará de llover. El viento se calmará. La temperatura se calienta.  Pronto encontrarás el arroyo con más calma, paz y alegría. 

En la vida hay curvas y zambullidas.  Y a medida que nos movemos por la vida, al igual que un arroyo, podemos tener agua que sale y arroyos que entran. Así como nosotros mismos tenemos momentos de ganar y otros de soltar. Como nos recuerda Eclesiastés 3:1, "Hay un tiempo para cada cosa, y una estación para cada actividad bajo los cielos".

¿Adónde te lleva tu arroyo? ¿Por qué tierras pasa tu agua? ¿Qué dejas entrar?  ¿Qué dejas que se vaya?  ¿Y quién sujeta la motosierra cuando se derrumba un árbol, causa estragos y hay que retirarlo?

¡Sé que Dios sostiene mi motosierra!

“Así que no temas, porque yo estoy contigo;

No te angusties, porque yo soy tu Dios.

Te fortaleceré y te ayudaré;

Te sostendré con la diestra victoriosa”

Isaías 41:10 

He tenido huracanes que han destruido mi paisaje, objetos imprevistos que han provocado aguas turbulentas y corrientes que han vertido agua no deseada en mi arroyo.  He aprendido que la calma volverá una vez más. Necesito liberarme de lo indeseable. Necesito dejar entrar lo bueno: amigos y estudios bíblicos que me ayuden a fortalecer mi fe. Y, sobre todo, necesito confiar en que Dios destruirá los árboles caídos que bloquean mi camino hacia Él.  

No siempre es fácil y a veces es imposible mantener nuestras vidas en un camino recto y alegre. Con Dios, Su Palabra, y compañerismo, los tiempos difíciles parecen no durar tanto, el arroyo sigue fluyendo, ¡y hay belleza por todas partes!

“El camino de Dios es perfecto;

La Palabra del Señor es intachable.

Escudo es Dios a los que en El se refugian” 

Salmo 18:30 


ACERCA DE NUESTRA BLOGUERA

Anteriormente era maestra, consejera y entrenadora personal, Kristin Ryan ahora ama ser ama de casa. Como alguien que ha encontrado el Cristianismo más recientemente, disfruta aprender y crecer en su fe y está emocionada de compartir su experiencia con los demás. Kristin y su esposo, Casey, tienen 3 hijos pequeños (uno nació durante la pandemia) y un perro grande.

ACERCA DE NUESTRA TRADUCTORA

Silvia Cubos nació en la ciudad de México, y se crio en la ciudad de Toluca, es la mayor de 5 hermanos. Estudió comunicación y después de graduarse llegó a este país en 1996 donde tuvo la oportunidad de estudiar Ingles y Educación temprana. Silvia ha trabajado como maestra, interprete y trabajadora social. Desde los 17 años Silvia ha sentido el llamado de servir al Señor y orar por las necesidades de otros, ahora lo hace en Willowdale en Español desde 2019. Silvia disfruta cocinar comida mexicana, caminar al aire libre con sus dos hijas y su perro; para terminar el día le gusta disfrutar de un helado de fresa.

Lecciones de una tarta "no tan humilde”

Nunca me he considerado una persona orgullosa. Vengo de orígenes humildes. Mis padres luchaban por salir adelante. Estoy agradecida por la infancia que tuve y el campo de entrenamiento que me proporcionó. Tuve que aprender muchas cosas para salir adelante. Coser, cocinar y hacer conservas, por nombrar algunas. Sé que soy mañosa y creativa, pero no muchas de mis habilidades son excepcionales. Siempre estoy dispuesta a intentarlo. A menudo, lo que creo es una nueva versión de una idea ajena, con la esperanza de utilizar los materiales que tengo a mano.

Donde sí destaco es en la elaboración de tartas. Llevo haciendo tartas desde que tenía nueve años, cuando recibí mi primer libro de cocina. Me llevaba todo el día hacer una tarta de manzana y crear una corteza de rejilla. Mi familia sólo tardaba cinco minutos en acabársela, pero aprendí bien a hacerla bien. Siempre hago la masa desde cero con mantequilla sin sal. En nuestra finca crecían moras, frambuesas y arándanos en abundancia todos los veranos. Había tartas en abundancia, normalmente cubiertas con nata montada casera. Yo creía que todo el mundo crecía con moras en cada rincón de su jardín y que todo el mundo horneaba tartas cada vez que podía. Éramos más ricos de lo que creíamos.

En los últimos años he llevado tartas a muchos eventos, he creado delicados palos de piruleta para tés elegantes y he sustituido el pastel por tartas en los cumpleaños de algunos amigos. Es una de mis emociones secretas ver a la gente disfrutar de un trozo de una de mis tartas. No siempre son perfectas, pero son sabrosas.

Una vez incluso llevé una tarta al tribunal. Después de formar parte de un jurado durante una semana, llevé una tarta el último día para celebrar la conclusión del caso. Cuando entré en el juzgado esa mañana, mi tarta no pudo ser escaneada en seguridad porque estaba en un plato de cerámica. La tarta y yo fuimos escoltadas a la sala del jurado por un guardia, por si había algún arma en ella.  Hasta aquí llegaré para compartir mi talento.

Hace algún tiempo, presenté dos tartas a un concurso en Filadelfia, en una feria callejera que celebraba la iglesia de mi hija. Hice una tarta sueca de manzana y otra de melocotón, de las que había que probar dos. Mi tarta de melocotón estaba decorada con estrellas en la corteza superior. La presenté con el nombre de tarta de melocotón "no tan humilde". Creo que debería haber ganado un premio sólo por el logro de transportar cuatro tartas por las calles del centro de la ciudad. La gente pasó por la fila y cada uno probó una cucharadita de las tartas y luego votó por su favorita. Resultó que un chico joven, novato en esto de hacer tartas, fue elegido ganador. Me sentí un poco decepcionada. 

Me sorprendí a mí misma inventando razones por las que este apenas novato había ganado. Debía de ser popular en la iglesia. Después de todo, ¿cuánta habilidad podía tener realmente?  La gente tenía demasiadas tartas para juzgar. Ninguno de ellos venía con credenciales de comida de verdad.  ¿He expresado alguno de estos pensamientos? No. Pero estaban ahí, calmando mis sentimientos heridos.

Ahora reconozco que se trataba de un problema de orgullo. Me estaba alimentando con mensajes que eran racionalizaciones de por qué no había ganado. Me pregunto cuántas veces acaricio pensamientos que probablemente no son ciertos y alimentan actitudes de prepotencia. 

Había estado pensando en este tema en las últimas semanas porque siento que el orgullo es uno de esos ídolos con los que la mayoría de nosotros luchamos de alguna manera. Luego, en el funeral de mi dulce tía misionera jubilada, me encontré con una verdadera batalla contra el orgullo y los celos. A otro miembro de la familia se le pidió que hablara en el servicio.  ¿Por qué no me lo pidieron a mí? Me consideraba más cercana a mi tía y más capaz de honrar su memoria.  Me avergüenza admitir que estaba tan ensimismada. ¿Por qué hice comparaciones y juicios en primer lugar?

La semana siguiente al funeral, nuestra lección de estudio bíblico trataba de los celos de Saúl hacia David. A medida que los logros de David crecían, el rey Saúl se agitaba hasta el punto de intentar matar a David. La lección abordaba claramente el tema con el que yo estaba luchando. Uno de los versículos finales a los que nos dirigimos fue Isaías 26:10, que sirve como recordatorio para considerar la Majestad del Señor. Esa es exactamente la verdad que yo necesitaba. Mi atención debe estar diariamente en la MAJESTAD de Dios. Todo lo demás palidece. Necesito hacer esto a menudo, pasando tiempo en Su presencia, reflexionando sobre todo lo que Él es y cómo Él está trabajando activamente en mi vida. Cuando hago esto, encuentro que mi espíritu está alegre y liberado del veneno del orgullo.

Las lecciones de mi tarta "No tan humilde" son simples. Puedo compartir un talento, pero no encontrar mi identidad en él ni permitir que alimente mi orgullo. También puedo simplemente estar agradecido de usar ese don en servicio agradecido al Señor, el dador de todas nuestras habilidades. La lección más significativa para mí es lo cerca que se siente Dios cuando nos acompaña en nuestras luchas.

El Salmo 34:8 nos dice: "Gustad y ved que bueno es el Señor". Él es bueno cuando nos ama. Es bueno cuando nos refina debido a nuestra debilidad y pecado. Saborea estar en la presencia de Dios. Reconoce la asombrosa verdad de que podemos ver y experimentar la bondad y la cercanía del Majestuoso.

ACERCA DE NUESTRA BLOGUERA

Linnea Tideman siempre ha disfrutado compartiendo historias. Su infancia en New Hampshire y su herencia sueca le han proporcionado una gran cantidad de experiencias, pero también la base de su fe.

Le gustan los proyectos creativos, los viajes, los libros, la costura, la jardinería, pero sobre todo la hospitalidad, a menudo organiza elegantes tés y ocasionalmente algo grandioso como recrear la cena en el Titanic.

Sirve en los ministerios de UrbanPromise y Good Neighbors. Linnea vive en Landenberg con su esposo Dave. Tienen tres hijas mayores. Ella espera que sus escritos reflejen cómo Dios continúa revelándose a nosotros como nuestro pastor y Salvador.

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Liliana Daza es la hermana mayor de 4 hijas de una familia colombiana muy conservadora. Oriundos de un pequeño pueblo ubicado en el Oriente de Colombia en frontera con Venezuela donde creció y pasó su niñez. Luego se mudó a la capital para terminar sus estudios superiores en el área de tecnología. En el año 2011 se trasladó a los Estados Unidos junto con su familia debido a una oportunidad laboral. Desde temprano, Liliana ha sentido un llamado para servir y apoyar a la comunidad, por lo que aprovecha cada oportunidad que Dios pone en su camino para este propósito. Liliana disfruta de un buen café negro, viajar, comer buena comida, especialmente cuando viaja. Liliana hace parte de la Iglesia Willowdale en español casi desde sus inicios.